Seguramente la mayoría de los hogares ya se tiñeron de algo de rojo, con un toque verde y blanco. Quizás algo de dorado o plata también pintó algún rincón.
Titilantes brillan las luces de nuestros árboles de navidad y melodías de villancicos inundan nuestras salas.
Y de seguro muchos de ustedes no dudaron en ponerse manos a la obra y sumar a la deco navideña un adorno bien casero, con la emoción de saber que lo hicieron pensando en ese momento especial que vivimos en la navidad o pensando en sus peques que tanto disfrutan de este tiempo mágico.
Siempre nos ponen un poco melancólicos estos días, nos remontan también a nuestra infancia, al menos a mí así me ocurre. Recuerdo la ansiedad que compartíamos con mis hermanas a la hora de sacar los adornos y comenzar con el armado del arbolito.
Hoy la emoción, la alegría, la ansiedad la comparto con mis peques. Este año especialmente con mi princesa que ya está más grande. Mi hombrecito es todavía un baby.
Y la tradición nueva, que empezamos desde que vivimos en nuestro hogar, es sumar cada año nuevos adornos en la deco. De a poco cada rincón de la casa va adquiriendo su toque navideño.
Y cómo habrán visto, no puedo dejar de lado mi afán por reciclar y reutilizar todo lo que más puedo.
Este año de la mano de una pasión, el tejido. Y con una técnica que ya les compartí en otra oportunidad. Mi centro de mesa es un cesto tejido con hilo de bolsas combinado con lana fina en color rojo, Simplemente usando punto vareta.
De ahí la deco del mismo con piñas de pino, figuras llenas purpurina, una cinta de gasa alrededor a la que sumé pequeñas estrellas doradas y una vela a tono para encender en nochebuena.
Trabajo sencillo pero bien decorativo.
Qué la magia de la Navidad encienda nuestra creatividad.
La Navidad saca lo mejor de todos nosotros, incluyendo nuestra creatividad que estos días está a tope.
ResponderEliminarBesos.
Muy alegre tu centro Daniela.
ResponderEliminarFelices fiestas
Daniela que bonito ese cesto tejido con bolsas y lana roja.
ResponderEliminarYa nos imaginamos la ilusión de estos días con tu princesa y el peque.
La Navidad también nos pone nostálgicas,pero siempre saca lo bueno de todos.
Muchos besos